(896-968) Matilde, emperatriz de Alemania, casada en el año 913 con Enrique I, fue una mujer muy solidaria, ayudó a las mujeres pobres, socorrió a menesterosos y enseñó a leer y escribir a sus servidores. Al enviudar, sus hijos la encarcelaron para poder quedarse con el trono, al recuperar su libertad creó el Convento Benedictino de Northausen, lugar donde murió.